En un futuro distópico pero no muy alejado de lo que ya pasa hoy en día, la disminución de las tasas de natalidad están poniendo en riesgo de desaparición a Japón, por ese motivo deciden legalizar las violaciones con el propósito de que haya más embarazo y de ese modo un aumento de población. Como era de esperarse, la situación rápidamente se salió de control y las violaciones se multiplicaron de forma exponencial.